El viernes 10 de mayo el café cotizaba a 199, 98 euros en la Bolsa de Madrid mientras que su precio en la de Nueva York alcanzaba 200,35, representando ese precio una variación del 0,76+ con respecto a las cifras del jueves 9 de mayo de este 2024. La rentabilidad como inversión a largo plazo parece asegurada dado, que a pesar de una reciente disminución del 27,5%, a lo largo del año su cotización ha aumentado por término medio un 3,78%. En los últimos 12 meses la cotización más alta escaló hasta los 248 euros mientras que la más baja descendió hasta los 178.
Todo esto en tiempos cuando se vuelve a hablar del café como auténtico ‘oro en grano’, teniendo al cacao como único competidor en el mercado de los materias primas naturales, es decir, obviando el mismo oro ( hoy por hoy está a unos niveles de 75,99 $ por gramo) y no teniendo en cuenta ni a la plata ni al platino, ni al cobre ( 28,28 $ el gramo, por eso se roba tanto, tantísimo que hasta el transporte por tren en la Cataluña del domingo electoral se tambaleó debido a un robo tremendo en la red ferroviaria…) ni al barril de petróleo Brent ni al crudo WTI ni al aceite para calefacción.
El café por encima del trigo, el maíz, el azúcar y el algodón. Café y Cacao. Cacao y Café. En abril, la materia prima de los mejores chocolates alcanzó la increíble cotización de los 10,000 $ por tonelada, encareciendo brutalmente el precio de las tabletas que llegan a los lineales de nuestros supermercados o a las estanterías de nuestras boutiques tendencia ‘from bean to bar/ del grano a la onza’.
Cacao. Café. Productos apreciadísimos y preciosísimos para los mercaderes y los inversores. Tanto o más que aquellas especiaspor cuya posesión algunos (Elkano, Magallanes) llegaron incurso a circunvalar por vez primera el planeta.
Café. En continua alza de precios. ¿Por qué? Por un lado por cuestiones geopolíticas El enfrentamiento atroz entre Hamás e Israel ha provocado no solo la solidaridad con Palestina de los estudiantes de medio mundo sino la intervención armada de los hutíes yemeníes que, apoyados en la oscuridad por el gobierno de Irán, amenazan con colapsar (de hecho así está, colapsado, desde hace un tiempo) el Canal de Suez que desde su entrada norte en el mar Mediterráneo hasta la del sur en el mar Rojo a través del estrecho de Bab el Mandeb, es una de las principales vías de tráfico marítimo en el mundo. Los hutíes, musulmanes chiíes, reclaman una intervención internacional decidida y decisiva contra las masacres de Oriente Medio y sueñan con la aniquilación de Israel. Ni EEUU ni la Unión Europea saben a qué carta jugar y mientras, el tráfico de grandes buques mercantes ha tenido que tomar otras rutas mucho más largas, pesadas y peligrosas, encareciendo brutalmente los costos del transporte y por tanto, el del producto final procesado a partir de las materias primas almacenadas en gigantescos contenedores en las bodegas de los buques.
Cargamentos, por ejemplo, de café variedad Robusta provenientes de Vietman (representa el 97% de su producción, unos 30 millones de sacos al año) tardan meses en llegar a destino, con una merma incluso en el peso y por tanto un desajuste entre los precios pagados y la carga recibida.
Por otro lado, los cataclismos naturales inciden también en los precios del café. Tanto en las Bolsas del mundo como en la taza que nos llevamos a los labios. Las espantosas inundaciones en el estado brasileño de Rio Grande do Sul (137 muertos y 2 millones de damnificados según datos del sábado 11 de mayo) provocadas por unas lluvias torrenciales han arrasado con las plantaciones de arroz y café que sus cultivadores intentaban recuperar tras otras dos situaciones realmente terribles vividas en el corto plazo de 8 meses y debidas igualmente a diluvios devastadores. Eso también ha hecho que la escalada de los precios haya sido espectacular porque la oferta es mil veces menor que la demanda. Y en las Bolsas los brokers y los agentes bursátiles saben bien jugar con esas fluctuaciones.
¿Y por qué cuando uno se conecta a las cotizaciones del café en Wall Street , en la City o en la Bolsa de Madrid se encuentra una y otra vez con la expresión ‘mercados de futuro’?
Se trata de una herramienta comercial para gestionar efectivamente el precio de venta y de compra del grano de nuestra bebida favorita, permitiendo al caficultor anticipar la venta hasta 24 meses antes de la entrega; es un compromiso entre ambas partes, vendedor y comprador, donde quedan definidos el precio, la calidad, la cantidad y la fecha de entrega. Para que sea lo más justo posible en el nunca justo mercado de valores, el vendedor tendrá que tener muy en cuenta los costes de su producción y el comprador aceptar que la Bolsa es, en cierto modo, un juego donde a veces pierdes algo y otras ganas mucho.
Hubo también inundaciones en el estado brasileño de Minas Gerais, lo que impactó el mercado de futuro de Londres. Se recuperó. Algo. Hoy, con vistas a julio esta es la situación: Los futuros del café en la bolsa de Londres han influido en el auge del precio, aumentando el 18,5 % hasta los 176,04 centavos (163,48 céntimos), en tanto que los de Nueva York se han elevado un 18,1 %, situándose en 217,97 centavos (202,41 céntimos), su nivel más alto en 20 meses.
Todo ello teniendo en cuenta que en marzo las exportaciones mundiales de granos verdes de café han sumado 11,87 millones de sacos de 60 kilos, suponiendo un incremento del 9,4 % anual…. Secretos financieros tras una taza de Etiopía Sidamo, un sorbo de Indonesia, unas gotas de descafeinado mexicano o un trago de Pico Cristóbal colombiano.
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